Jibia
¿Qué opina de ellos?
Las sepias son una de las especies marinas más inusuales de Tenerife. Por suerte las vemos en la mayoría de nuestros sitios de inmersión.
Siempre es interesante ver cómo cambian de color y patrón tan rápidamente dependiendo de su estado de ánimo y se camuflan para adaptarse al entorno. Todavía no los he visto cuando se sienten amenazados, pero se sabe que sueltan tinta para intentar confundir a su depredador.
Familia de calamares y pulpos
Pertenecen a la misma familia que los calamares y los pulpos. A su vez, se encuentran entre los invertebrados más inteligentes, con una de las mayores proporciones entre el cerebro y el cuerpo. Las sepias tienen un caparazón interno único, conocido como hueso de sepia. Está lleno de gas y se utiliza para ayudar a controlar su flotabilidad. En la actualidad, los huesos de sepia se utilizan comúnmente como suplementos alimenticios ricos en calcio para aves enjauladas, chinchillas, cangrejos ermitaños, reptiles y caracoles. Las sepias se alimentan de pequeños moluscos, cangrejos, gambas, peces, gusanos y a veces de otras sepias, utilizando su camuflaje como táctica de caza.
Las sepias nadan en el fondo, donde se encuentran las gambas y los cangrejos. Lanzan un chorro de agua para descubrir cualquier presa que pueda estar enterrada en la arena. Si la presa intenta escapar, la sepia utilizará dos largos tentáculos de alimentación para agarrarla. En el extremo de cada tentáculo hay una almohadilla cubierta de ventosas que utiliza para atraer a la presa hacia su pico, donde la paraliza con veneno y luego se la come.
También se sabe que las sepias cambian rápidamente de color para conseguir un efecto de hipnosis y así aturdir a sus presas antes de capturarlas. Entre sus depredadores se encuentran delfines, tiburones, grandes peces, focas, aves marinas y otras sepias. La esperanza de vida media de una sepia es de uno a dos años.
Temporada de apareamiento
Los machos de la sepia se desafían por el dominio, lo que es esencial durante la época de apareamiento. Durante este desafío, no suele haber contacto directo. Los animales se amenazan mutuamente hasta que uno de ellos retrocede y se aleja nadando. Finalmente, las sepias macho más grandes se aparean con las hembras agarrándolas con sus tentáculos. Ambos animales se encuentran cara a cara, y el macho utiliza un tentáculo especializado para introducir sacos de esperma en una abertura cercana a la boca de la hembra. A continuación, el macho vigila a la hembra hasta que ésta pone los huevos unas horas más tarde.
El método más exitoso para conseguir pareja es el camuflaje. Las sepias más pequeñas utilizan su capacidad de camuflaje para disfrazarse de hembra. Lo hacen cambiando el color de su cuerpo y ocultando sus brazos adicionales (los machos tienen cuatro pares mientras que las hembras sólo tienen tres). Incluso fingen tener un saco de huevos. Los machos disfrazados son capaces de pasar nadando por delante del macho guardián, más grande, y aparearse con la hembra... ¡unos animales muy listos!
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Dan